Disfrutando de las pequeñas cosas

Disfrutando de las pequeñas cosas

«Todos tenemos una reserva de fuerza interior insospechada,
que surge cuando la vida nos pone a prueba».
Isabel Allende

Feliz día,

Llevo un tiempo deseando escribir un post así. Y es que sinceramente, aunque parezca algo de perogrullo, nos hemos afanado constantemente a base de esta rutina del día a día, en cumplir con las tareas programadas y dejar espacio (poco) para lo que realmente nos enriquece.

Queremos ser tan productivas, llegar a tantos sitios y sentirnos (y hacer sentir) a los demás tan bien, que llegamos al final del día agotadas, con cansancio e incluso con falta de tiempo para nosotras.

¿Nos estamos arrastrando hacia una vida en la que nos olvidamos de lo realmente importante?

Hay veces que creo que sí. Y me daba cuenta al final del día, justo antes de meterme en la cama.

Veía que no me había dado tiempo a hacer esas pequeñas cosas mías (como ver una serie, leer un capítulo de un libro o dar un paseo por la ciudad).

Me he ocupado muy mucho de tachar de la agenda todo lo que tenía planificado, para eviatr arrastrar al día siguiente más cosas. Dejaba todos los emails contestados, todos los mensajes de WhastsApp, me hacía un pequeño cálculo de lo que me quedaría de tiempo libre al día siguiente…

Pero me daba cuenta de que en mi afán de ser muy productiva y eficiente me estaba dejando a un lado tiempo de calidad para mí. Hasta que me di cuenta de que necesitaba cambiar mi chip para ser aún más feliz.

Es entonces cuando eres consciente y disfrutas de cocinar tu plato favorito a fuego lento, en lugar de comprarlo ya hecho. Cuando pones el móvil en modo avión o en silencio y prestas atención a la conversación que estás manteniendo. O Cuando dejas para más tarde ese mensaje porque estás viendo una maravillosa puesta de sol.

Disfrutando de las pequeñas cosas es como me he dado cuenta de que ahí radica realmente la consciencia. Tanto en los momentos buenos como en los malos (que están ahí para enseñarnos, para que aprendamos de ellos a ser más fuertes).

Por eso te invito a que de vez en cuando «planifiques» tiempo para ti de calidad. Que dejes de poner el foco y tu atención en los demás. No se trata de ser egoísta ni mucho menos. Simplemente que seas aún más consciente de que el tiempo que pasa no vuelve. Que lo que dejes para mañana a lo mejor no lo vas a poder hacer. Y que lo que disfrutas no puede quitártelo nadie.

La vida al final es un baile, así que… ¿Bailamos?

Nos leemos en breve. Con amor,

I.

Disfrutando de las pequeñas cosas

Please follow and like us:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Social Share Buttons and Icons powered by Ultimatelysocial